La fijación de precios en cualquier tienda, sin importar el nicho, también puede considerarse una estrategia de marketing para las ventas en línea. Unos precios adecuados pueden generar interés, motivar las ventas y atraer nuevos clientes a tu negocio.
Lo mejor del entorno digital es que puedes cambiar los precios con mayor facilidad. Sin embargo, ten cuidado de no hacerlo con demasiada frecuencia. De lo contrario, decepcionarás a tus clientes y les harás pensar que estás actuando de forma poco fiable.
Hemos recopilado una lista de las 5 mejores estrategias efectivas para los precios que decidas establecer en tu tienda online.
1. Conozca su mercado y sea competitivo
Cuando los consumidores compran productos o servicios en línea, están más motivados y son más capaces de investigar el mercado y elegir el mejor precio . Asegúrese de que este precio sea el suyo. Si no puede permitirse bajarlo, ofrezca bonificaciones y descuentos para un segundo producto u otros beneficios que su competencia no incluya. Asegúrese de que la oferta sea rentable para la empresa.
2. Ofrecer la posibilidad de negociar el precio
¿Cómo? Piensa en distintos tipos de servicios similares, más simples y complejos, con diferentes precios. Los consumidores en línea ya están acostumbrados a esto y suelen buscar este tipo de opciones. Ofréceles más soluciones para que no las busquen en la competencia.
3. Demostrar las diferencias
Asegúrate de que quienes ingresan a tu tienda en línea entiendan qué pagan y qué pierden si pagan a tus competidores.
4. Permitir que los consumidores prueben o vean el producto antes de comprarlo.
Ofrece a los consumidores la opción de probar tu producto a cambio de una comisión. A menudo, el miedo al comprar en línea reside en no poder devolver el producto si no les convence. La comisión, al menos, te reembolsaría los gastos de envío.
5. Dales dinero para sus compras
Llena su billetera electrónica con bonos y monedas especiales que podrán usar en tu sitio web, según el valor del pedido realizado. Este dinero también se usará para comprar tus productos. Es una forma sencilla y agradable de cuantificar los regalos.
El hecho de que los clientes todavía tengan dinero para gastar en sus productos y servicios hará que regresen.
