¿Por qué necesitamos un salario mínimo?

24.03.2020

Escrito por Tudor Mardari

¿Por qué necesitamos un salario mínimo?

Las teorías económicas nos enseñan que el costo de la mano de obra, como cualquier otro producto, está determinado por la oferta y la demanda dentro del mercado. Algunos economistas bastante serios van aún más lejos y argumentan que cualquier restricción en las condiciones de trabajo es perjudicial, y si un empleado no está satisfecho con su lugar de trabajo, entonces, en el mercado libre, siempre puede cambiar su empleador y sus condiciones.

Casi todos los países desarrollados regulan altamente su mercado laboral: la tarifa mínima por hora, las horas de trabajo, los beneficios de desempleo y otras medidas se han implementado en toda Europa y América del Norte durante los últimos 100 años, y continúan expandiéndose en la actualidad.

Alemania se ha convertido en uno de los últimos países de la UE en adoptar la ley sobre salarios mínimos: desde 2015, una hora trabajada cuesta al menos 8,50 €, y en 2017 se ha elevado a 8,84 €.

Algunas de las economías emergentes menos ricas se están moviendo en la misma dirección. Por ejemplo, desde julio de 2017, el salario mensual mínimo en Argentina se establece en 8860 pesos, y cada seis meses está indexado por inflación: desde enero de 2018 - 9,500 pesos, desde julio de 2018 - 10,000 pesos.


En 1970, se adoptó el Convenio de la Organización Internacional del Trabajo en la ONU No. 131 "Sobre salarios mínimos", con la intención de desarrollar un conjunto de reglas en aquellos países donde el estado por sí solo no podría establecer un sistema de salario mínimo.


Solo seis países de la UE no han adoptado ninguna legislación sobre salarios mínimos: Suecia, Finlandia, Dinamarca, Austria, Italia y Chipre. Pero en estos países, los bajos salarios están excluidos por otro mecanismo: un acuerdo colectivo entre el empleador y el empleado.


En los Estados Unidos, donde las libertades del mercado siempre han sido más estables que en Europa, existe un salario mínimo federal por hora de $ 7.25 / hora. En algunos estados, el salario mínimo por hora supera los $ 10 y aumenta cada año para llegar a $ 15 / hora.


¿Cuáles son los motivos de tales restricciones a los salarios impuestos, en contra de las nociones bien conocidas de oferta y demanda?


Razón # 1. Mano de obra mal calificada no calificada

El ejemplo más simple es la situación en la que hay más solicitantes que empleos disponibles, y el empleador dicta sus condiciones a los solicitantes. En teoría económica, tal sesgo del mercado se llama monopsonio. A veces, esta es una situación natural, como en las ciudades de una sola industria construidas alrededor de una empresa. Otras veces, es artificial, cuando los empleadores crean una escasez de empleos para bajar los salarios.


Razón # 2. El crecimiento de la productividad laboral no conduce automáticamente a salarios más altos.

Una de las principales fuentes de crecimiento económico es el aumento de la productividad laboral debido al progreso científico y tecnológico. La introducción de nuevas tecnologías aumenta la cantidad producida por el empleado por hora. Tal mejora debería imponer un aumento salarial: más productividad = más dinero, pero de hecho, esto no siempre funciona así.


Razón # 3. El empleo a tiempo completo no garantiza grandes ingresos

En el mundo moderno, si trabaja a tiempo completo, esto no significa que no será pobre. El fenómeno no es único y no solo ocurre en países con economías débiles. En el Reino Unido, por ejemplo, la mitad de los ciudadanos desfavorecidos cuyos ingresos son inferiores al 60% pertenecen a familias trabajadoras.


Razón # 4. El estado subsidia a los empleadores de bajos salarios

En muchos países, los ciudadanos que trabajan con bajos ingresos reciben asistencia material del estado en forma de subsidios y beneficios. Resulta que el estado paga dinero extra a los empleadores para que los trabajadores con salarios bajos puedan hacer frente a los gastos necesarios y no sufrir hambre. Algunas veces estas cantidades son muy significativas.


Razón # 5. Los salarios mínimos luchan contra la desigualdad económica

Los salarios bajos son los que crecen muy lentamente, mientras que los de los gerentes aumentan a un ritmo fantástico. Esta enfermedad de las economías desarrolladas y en desarrollo se conoce como desigualdad económica. La herramienta principal para combatir la desigualdad económica es la redistribución del ingreso, que también se lleva a cabo mediante el establecimiento e indexación de salarios mínimos.


Razón # 6. Los salarios mínimos luchan contra la desigualdad social

En ausencia de un nivel mínimo de remuneración, los empleadores pueden ahorrar fácilmente contratando a quienes generalmente se les paga menos por la misma mano de obra. Los salarios más bajos son una de las medidas para combatir la discriminación: cuanto menor sea la capacidad del empleador para manipular el salario, menos formas de ganar con los prejuicios sociales.

¡Esperamos que estos seis argumentos lo hayan convencido de que los salarios mínimos son justo lo que todo país necesita para llevar a cabo una actividad económica normal e igualitaria!


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