Muchos gerentes carecen de habilidades básicas de liderazgo. El control excesivo a menudo les impide tomar decisiones innovadoras. A pesar de que los requisitos generales para un líder dependen de la situación, las competencias básicas de dicha persona permanecen sin cambios: la alta profesionalidad y la capacidad de adaptarse rápidamente.
El desarrollo del liderazgo comienza con la confianza. A menudo, los gerentes carecen de la confianza de sus supervisores. En las empresas extranjeras, existe una práctica en la que un empleado es totalmente responsable de su área de trabajo, se convierte en su único gerente. Al mismo tiempo, el jefe de la empresa establece objetivos, pero no planifica los detalles del trabajo. Este enfoque es efectivo desde el punto de vista del desarrollo de liderazgo en la organización, ya que el gerente tiene la oportunidad de mejorar a sí mismo como líder. Puede mostrar determinación, planificar el trabajo, tomar decisiones y ser responsable de sus acciones. Si los directores confían en sus gerentes, los últimos comienzan a pensar de maneras completamente diferentes: se interesan en el desarrollo empresarial y la satisfacción del cliente, perciben los éxitos y fracasos con una conciencia genuina, sienten su responsabilidad junto con los propietarios de la empresa y se vuelven reales empresarios
El sistema de desarrollo de liderazgo debe incluir aprendizaje y práctica . La mejor manera de alentar a un empleado a desarrollarse es identificar sus fortalezas e indicar en qué se debe trabajar. El uso de métodos modernos de enseñanza al empleado ayudará a tener una idea objetiva de su nivel profesional y habilidades de liderazgo.
Algunas compañías realizan prácticas de liderazgo con regularidad para gerentes de departamentos clave. La efectividad de la capacitación se evalúa en función de cómo el empleado aplica los conocimientos adquiridos en la práctica.
Como muestra la práctica, los empleados que desean desarrollar habilidades de liderazgo, observar a sus líderes y aprender de su experiencia. La presencia de un modelo a seguir contribuye al desarrollo del liderazgo dentro de la organización. El uso de un sistema de mentoría es una de las formas más efectivas de crear las habilidades de liderazgo necesarias entre los empleados.
El líder puede observar al colega principal, aprender de su administración y métodos de toma de decisiones, profundizar en los motivos de su comportamiento, comprender la lógica de las acciones y analizar sus cualidades personales. De manera óptima, un empleado puede elegir un "modelo a seguir" para sí mismo y, después de la observación y el análisis, desarrollar su propio plan de acción, teniendo en cuenta las características del "modelo a seguir". La imitación es una de las formas más efectivas de aprendizaje. A pesar de que cada líder es una personalidad brillante, el intercambio de experiencias siempre es beneficioso para todos los empleados.
Cada empleado en una posición gerencial necesita tener un plan de desarrollo personal , que enfatice la adquisición de nuevas habilidades, y no el desarrollo de su carrera. En primer lugar, debe enumerar sus logros profesionales y personales que le permitirán comprender su punto de partida.
El desarrollo del liderazgo en cualquier empresa implica objetivos claros y transparentes para cada futuro líder. Un plan de desarrollo de los empleados puede contener tareas para el año, indicadores clave de desempeño, actividades de capacitación necesarias. La finalización exitosa de ciertos cursos, la lectura de literatura profesional y la capacitación para principiantes pueden convertirse en una condición para el avance del liderazgo. Por ejemplo, algunas empresas extranjeras obligan a cada líder a capacitar a sus subordinados, y los resultados de la capacitación se tienen en cuenta al evaluar las cualidades de liderazgo del gerente.
La capacitación y el desarrollo del personal es una de las áreas clave de los negocios modernos. Las tendencias empresariales actuales implican que los empresarios prestan mucha atención al desarrollo del talento de sus empleados. La contribución a las habilidades de liderazgo profesional dentro de la organización no solo prepara profesionales independientes y proactivos, sino que también aumenta el nivel de recursos humanos de la empresa.
